La clase trabajadora en el Líbano, Siria, Cisjordania, Egipto, Arabia Saudita, Turquía, Irak, Irán, Israel... debe estar unida independientemente de las divisiones religiosas y étnicas. Debe defender el derecho de los palestinos a desmantelar el estado colonial. Debe exigir el derecho a la autodeterminación de las nacionalidades oprimidas, en particular los kurdos. Debe apoyar la lucha de los trabajadores, asalariados, campesinos, estudiantes y mujeres iraníes contra el régimen de los mulás, hasta su derrocamiento y reemplazo por un gobierno de los trabajadores y trabajadoras.