Durante casi dos siglos, el Estado de la burguesía francesa se ha apoderado de un territorio lejano, esclavizando por la violencia a un pueblo que no le había pedido nada. Recientemente, su Consejo de Estado afirmó que los colonos deben tener los mismos derechos que los indígenas para decidir sobre el futuro de Kanaky (26 de diciembre de 2023). Hoy, su gobierno está reprimiendo a gran escala el levantamiento provocado por la colonización y su actual campeón, Macron.

Los comunistas internacionalistas siguen apoyando, como base mínima para la solidaridad con el pueblo palestino, el llamamiento del 17 de octubre de los sindicatos palestinos a un alto el fuego inmediato y al boicot a todos los suministros de armas y combustible, incluidas las instalaciones tecnológicas y de inteligencia, al estado sionista.

Es posible poner fin a todo este sistema podrido si, más allá de las fronteras, la vanguardia de los trabajadores se reagrupa en una internacional obrera revolucionaria basada en el marxismo.

Todo se está haciendo con el apoyo y complicidad de los EEUU y del resto de las potencias imperialistas occidentales, secundados por la mayoría de los gobiernos del mundo. Unos y otros manifiestan - de cara a la galería - tristeza y preocupación por la población civil e incluso llegan a solicitar humildemente el alto al fuego humanitario, como quien pide a la Virgen que llueva. Pero todos, de una manera u otra, continúan proporcionando soporte bélico, armas, municiones, combustible e información, facilitando la empresa genocida de su aliado colonial sionista.

La lucha por alcanzar o conservar los derechos democráticos y las adquisiciones sociales y laborales de las mujeres trabajadoras es imposible de separar de la lucha de la clase obrera por alcanzar o conservar los derechos democráticos y las adquisiciones sociales y laborales de toda la clase. Es una trampa toda la ideología de los movimientos identitarios del feminismo burgués y pequeño-burgués, centrada en la conciliación de todas las mujeres por encima de las clases y preocupada fundamentalmente por mejorar la vida de las mujeres de las capas sociales mejor situadas.

Revista publicada por el CoReP, recopilación de documentos del año 2023

El llamado de los sindicatos palestinos es una plataforma mínima que pueden apoyar todos los sindicatos y organizaciones obreras del mundo. Se trata de defender la existencia física de la clase trabajadora palestina.

Llamamos a participar en la manifestación del 26 de enero de 2024 frente al parlamento en Viena bajo el lema «Frente unido de los trabajadores contra el fascismo». ¡Sólo una política consecuente en interés de la clase trabajadora, independientemente de su origen étnico, puede detener la ofensiva reaccionaria!

Las supuestas “huelgas generales” de la burocracia, ya sean de 12, 24 o 36 horas, sólo llevan a la desmovilización en el mediano plazo. Las multisectoriales, intersindicales y distintos tipos de reagrupamientos que han surgido, tenderán a dispersarse a medida que las burocracias sindicales se van sentando a transar “paritarias” a la baja, sin consultar con la base, y se bajan de la lucha a pesar de haber cantado mil veces “Unidad de los trabajadores”.

Massa y Milei son dos candidatos de la burguesía que están enfrentados sobre la mejor manera de hacer pagar la crisis a los trabajadores. La clase obrera no tiene un candidato detrás del cual pueda reunir sus votos de forma independiente.